Recuerdame
Necesito sólo una noche para impregnar tu cuerpo con mi olor, con movimientos acompasados quiero escribir en tu vida hojas interminables de caligrafía que me necesitas, tanto como yo a ti esta noche calurosa que me une más a ti, en el intento desesperado de que sientas que cada aliento, gemido y roce con tu piel pide a gritos que comprendas que quiero ser tuya para siempre, comer del plato de tu abrazo y beber sorbo a sorbo tu lujuria, mientras la locura es testigo de esta velada donde protagonizan las ganas de un encuentro anhelado con la esperanza de que cuando el sol acaricie tu espalda, tengas un sabor a mi que te haga recordarme y habré cumplido mi cometido sellando un pacto invisible con tu sonrisa retorcida.
Carola Zerlín
29.03.2010
29.03.2010
