Ella
Era una enamorada irremediable, fiel creyente del amor, de la fuerza de la entrega, soñadora de momentos mágicos; ella escribía canciones ilusionada, como quien le escribe oraciones a la luna y de su melodiosa voz salían diferentes tonadas el nombre del amor, el que fuese en el momento, pero amor grandote al fin; llegó un día en el cual se cansó de cantar, de escribir... y de soñar, el miedo y la decepción acobijaron su guitarra y su voz, aquello que fue un corazón anhelante lentamente se aletargó... la espera se hizó muy larga y simplemente... ella, ya no cree en el amor.
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